Report by an expert group on Foresight on Key Long-term Transformations of European systems: Research, Innovation and Higher Education (KT2050). Foresight is an important tool to help us face the future with confidence, understand opportunities and risks, and help us develop our medium to long term strategies for research, science and innovation policy. It takes many guises: trends, signals, scenarios, visions, roadmaps and plans are all parts of the tool-box for looking to the future. In addition to these tools, using foresight requires an in-depth reflection on the policy implications and related scenarios. Europe’s research, innovation and higher education systems are the foundation of our economic and social prospects, shaping our ability to tackle numerous challenges at both local and international level. Globalisation, demographic changes and technological advances pose important challenges and opportunities for research and innovation in Europe. By reflecting on the trends and articulating scenarios, this report helps us think differently about European policies in the medium to long term.

El presente artículo enfoca desde una perspectiva crítica la prospectiva en ciencia y tecnología. En primer lugar, describe cómo para la ciencia los nuevos avances, los descubrimientos y los cambios de paradigmas son tierras enteramente desconocidas. En segundo lugar, analiza la manera en que la previsión tecnológica se presenta como un arte aventurado, muy fecuentemente desmentido por la historia. En tercer lugar, explora los años del futuro y su relación con lo que los expertos definen como "tecnologíasclave" o "críticas", sobre las cuales los países industriales orientan actualmente la mayor parte de su I+D industrial. Finalmente, examina el futuro de las políticas de la ciencia y la tecnología.

La economía global transita una nueva fase que se caracteriza por la digitalización y la conectividad. “INDUSTRIA 4.0. Fabricando el Futuro” explora los impactos de la denominada Cuarta Revolución Industrial sobre la producción manufacturera, el trabajo, las cadenas globales de valor y el comercio. La publicación reúne las voces de diversos especialistas que analizan los desafíos y oportunidades para la industria que conllevan tecnologías como Internet de las cosas, computación en nube, big data, inteligencia artificial e impresión 3D, entre otras. Asimismo, presenta los estudios de caso realizados sobre la experiencia de dos firmas argentinas que dan cuenta de los alcances de la trasformación digital: Tenaris, dedicada a la producción de tubos para la industria de petróleo y gas; y Sinteplast, dedicada a la fabricación de pinturas. “INDUSTRIA 4.0. Fabricando el Futuro” recorre estas experiencias, así como los aportes de la industria automotriz y de políticas públicas de fomento a la industria, como el caso alemán de “Industrie 4.0” y el “Mapa de ruta de la Industria 4.0” de México. De este modo, se propone ofrecer un marco para la comprensión de un fenómeno complejo cuyas consecuencias apenas se comienzan a vislumbrar.

The Global Innovation Sweepstakes: A Quest to Win the Future examines how emerging technologies will remake the global order and explores strategies for how the United States can retain its innovative edge. Tech-based innovation—in fields such as artificial intelligence, robotics, green energy, and biotechnology—will reshape the future of human civilization. Those nations that can create and adapt to cutting-edge technologies will realize enormous economic and geostrategic benefits in the decades to come. It is with this realization that the Atlantic Council’s Scowcroft Center for Strategy and Security, in partnership with Qualcomm, embarked on a global tour of technology hubs to find out which ones are at the cutting edges of innovation and which are at risk of falling behind.

El proposito de este trabajo es evidenciar la realidad y actualidad del Teletrabajo en las poblaciones menos favorecidas, analizando desde el punto de vista legal, su aplicabilidad e implementación en Manizales, basándose en las formas de vinculación, las garantías laborales, su impacto, efectividad de las actividades asignadas a los teletrabajadores, así como los mecanismos dispuestos por el gobierno para lograr la estandarización de esta novedosa forma de trabajo. Para lo anterior, es importarte determinar qué es el Teletrabajo, a raíz de qué surge, cuál es su función en la sociedad manizaleña, cómo cumple esa modalidad de trabajo con los lineamientos de la Constitución Política, cómo ha sido su evolución a través de los años y hasta dónde se podría llegar en el futuro.

El impacto más obvio y comentado desde el primer momento ha sido la explosión del trabajo en remoto. “El coronavirus provoca el mayor experimento de teletrabajo de la historia” o titulares similares abundan. Los gobiernos y empresas han corrido a facilitar el trabajo en remoto. Muchos proveedores tecnológicos para el trabajo en remoto, además de añadir servidores para soportar tal pico de demanda, han ofrecido servicios gratuitos o fuertes descuentos para nuevos usuarios. Lo interesante ha sido ver cómo la gente que lleva años trabajando de esta manera ha alertado que la cosa de trabajar en remoto no es tan “plug & play”

Que el mismo trabajo para toda la vida pertenece al pasado es, quizá, uno de los pocos consensos existentes en el debate sobre el futuro del trabajo. En un mundo global, en el que el tiempo parece avanzar más rápido que nunca, el torbellino de nuevas tecnologías que caracteriza a la cuarta re- volución industrial amenaza con cuestionarlo casi todo. Un aspecto fundamental de esta discusión es la legislación laboral, cuyos cimientos, que en América Latina y el Caribe datan de la primera mi- tad del siglo XX, se están viendo interpelados.

En esta cuarta entrega de la serie “El futuro del trabajo en América Latina y el Caribe” exploramos cómo será el futuro para las mujeres en la fuerza laboral. Primero, destacamos que, aunque tanto los hombres como las mujeres pueden perder sus empleos en la revolución digital, las mujeres corren un mayor riesgo frente a la automatización. Luego, exploramos el potencial de la economía gig para superar algunas de las barreras que obstaculizan la participación de las mujeres en el mercado laboral.

En esta nota, la tercera de la serie "El futuro del trabajo en América Latina y el Caribe", combinamos fuentes tradicionales y nuevas fuentes de datos para explorar el impacto que el cambio tecnológico ha tenido en la evolución de las ocupaciones y la demanda de habilidades en la región. Además, mostramos el potencial de una herramienta que funciona como un GPS del mercado laboral y que brinda la oportunidad a los trabajadores de América Latina y el Caribe de detectar las habilidades que les permitirán pasar de una ocupación en declive a una emergente. . * Para acceder a los videos, audios y otros contenidos interactivos que subrayan los mensajes más importantes de este documento, lo invitamos a descargar la versión interactiva de esta nota en http://www.iadb.org/futureofwork.

En el marco de la celebración de los 20 años del teletrabajo en Brasil se realiza este informe sobre el Estado del Teletrabajo en América Latina, como una ocasión especial para analizar las fortalezas y los desafíos de esta modalidad laboral en la región. Para ello, se contó con el criterio de expertos, gobiernos, academia, organismos internacionales y otros actores vinculados a la temática. Hace 20 años Brasil fue pionero en América Latina en incorporar el teletrabajo como parte de los nuevos paradigmas de gestión laboral. Hoy, veinte años después, más países han adoptado este esquema como un medio que contribuye con la inserción laboral, la modernización, la disminución de la movilidad urbana, y la calidad de vida, entre otros. Si bien la evolución de las tecnologías digitales ha permeado el mundo del trabajo, al facilitar la aplicación de nuevas prácticas laborales como el teletrabajo, se mantienen desafíos comunes para su implementación; entre ellos el ajuste de un marco normativo que contemple el trabajo virtual, un cambio cultural que impulse la gestión laboral apoyada en las tecnologías digitales, el fortalecimiento de nuevas competencias laborales, así como el uso y acceso de tecnologías inclusivas.